Este proceso tiene triple propósito:
a) El formativo, orientado a que el estudiante reflexione sobre aquellos actos considerados ética, social, institucionalmente reprochables. b) El correctivo, orientado a que los estudiantes encaucen su comportamiento en concordancia con los establecido en los estatutos, reglamentos, acuerdos y demás disposiciones dictadas por la Universidad. c) El sancionador, por cuanto constituye que el quebrantamiento de los deberes acarrea consecuencias. Estas consecuencias guardan proporcionalidad con la gravedad de las faltas. |